bang

Quiero que sonrías pensando en mi cuando caminas de vuelta a casa y que escuches a alguien hablar por la calle y te acuerdes de mi voz. Que te vuelvas porque te ha parecido leer mi olor en el viento cuando ha pasado una chica que no tiene nada que ver conmigo. Cuando tontees en el bar con alguna muchachita con cara inocente quiero que sea mi rostro el que te asalte, o mi forma de mirar, o lo que sea. Y, que cuando te la folles -si esa noche tienes suerte- me dediques algún pensamiento y  te descubras pensando que a mi quizás también me habría convencido su cara de corderillo. Quiero que me escribas cuando estés borracho con la excusa más tonta, que no seas capaz de decirme algo importante y tengas que pensar en tonterías, como el frío, lo que sea. Quiero que te calientes y ardas acordándote de mi forma de acariciarte la espalda y esconderme en tus costados. Quiero que me quites toda esta tristeza que llevo de serie a mordiscos y que luego te marches, pero que no sea demasiado lejos. A veces no sé aplacar la soledad como se debe y pesa. Pero eso tú ya lo sabes.