Puedo desangrarme sin siquiera tocar una cuchilla. Puedo pasar horas y horas pensando en ti, como si no hubiera nada más interesante que tu risa ni ninguna prisión más dolorosa que tu olvido. Como si todo lo que te rodea hubiera sido tocado por dios y no hubiera más mundo que ese, como si nada más mereciera la pena. He invertido en descifrarte lo que a mi me han parecido cien años. Probablemente en años de perro han sido cien años. He dedicado todo el tiempo del mundo a odiarte y aún más a quererte, porque por mucho que me repitiera "por favor, hoy no" lo cierto es que nunca he dejado de cogerte el teléfono. Ni siquiera he dejado de querer que me llames.
He empezado los últimos años cagándola y he amasado más tristeza de la que debería. Me he caído y me he preguntado por qué no estabas ahí y cómo han cambiado las cosas de esta manera tan fea. Luego he olvidado tus desplantes y tus adioses fingidos y he justificado una a una todas las erratas que has cometido. Como si fuera yo -y no tú- quien ha escrito como ha querido esta historia de mierda.
He tenido malos sueños en los que tú eras el protagonista y me he colocado con cualquiera con tal de no dejar que te cueles en mi pensamiento. He empeñado mi propia memoria y mi propio orgullo con tal de que me mires. Puedo hacer todo eso y más. Puedo pensar que no sé lo que haces cuando, en realidad, trazaste un plan hace mucho y te ha funcionado siempre, mientras yo me conformo con las migajas.
Puedo esperar la salida de emergencia porque no temo tomar decisiones en el último minuto. Puedo hablar con los ojos, puedo leer en la espuma del mar -antes de que desaparezca- historias de los ahogados. Puedo hacer equilibrios en el abismo de tus pupilas aunque no te hayas dado cuenta. Puedo contar historias de piratas, de marineros, de alienigenas y puedo crear mundos más oscuros y más vivos que cualquiera. Puedo poner los dos pies sobre la tierra y puedo mantener, aún así, mis raíces en el aire. El agua mansa que conforma mis entrañas corre profunda. Tengo talento para decir mentiras. Aprendo deprisa y la cago rápido, hasta que me tocan la fibra de corazón de dragón.
Puedo mandarte a tomar por culo en cuatro idiomas diferentes.Mira.